Los tres chanchitos feroces


H
abía una vez un lobo que ya había crecido y debía hacer su casa. La mamá loba le dio una moneda de oro para que se compre los materiales y haga su hogar, estaba mirando la televisión y mandó un sms a un concurso y gano muchísima plata.
    Con la plata que ganó y la de su madre pudo hacer tres casas, una para fin de semana, otra para vacaciones y la última era en la que vivía en el resto del año.
    Se había enterado por los vecinos que cuando llegaba el atardecer había que quedarse adentro de la casa porque aparecían los tres chanchitos feroces; un día estaba el lobo haciendo refacciones en la casa y estaba por llegar el atardecer, pero aunque sabía que corría riesgo quería terminar ese mismo día.
    Estaba por terminar cuando escuchó el ruido del motor de la moto que usaban los chanchitos y se metió volando en la casa.
    Llegaron los chanchitos a la casa del lobo para robarle el terreno y le mandaron un e-mail al lobo, sabían el e-mail del lobo porque también eran hackers, el lobo prendió la netbook y leyó el e-mail: salí ya de tu casa por la buena o te sacamos por las malas. El lobo se rehusó a salir y los tres chanchitos fueron a buscar un enorme ventilador y lo pusieron en la puerta, como la casa era de paja voló todo en un instante.
    El lobo salió corriendo a la otra casa y se metió adentro, cuando por detrás venían los chanchitos con el enorme ventilador, le volvieron a mandar el e-mail diciendo: salí ya de tu casa por las buenas o te sacamos por las malas. El lobo no dijo nada y los chanchitos prendieron el ventilador, como la casa era de ramas también voló rápidamente.
    El lobo salió corriendo a la otra casa, esta era más fuerte porque era de material, se metió adentro y se quedó tranquilo. Cuando llegaron los chanchitos y prendieron el ventilador a la casa sólo se les movían las cortinas como si fuera una simple brisa, viendo los chanchitos que esto ya no servía se pusieron a pensar qué harían, mientras que el lobo estaba muy tranquilo escuchando música en  el MP4 sin saber que los chanchitos seguían allí planeando una nueva forma para quedarse con el terreno del lobo.
    Los chanchitos estaban por entrar por la chimenea y el lobo sin la más pálida idea de que algo estaba pasando, los chanchitos bajaron por la chimenea sorprendiendo al lobo, el lobo no sabía qué hacer porque los chanchitos eran más fuertes que él así que en cuanto dieron un paso, el lobo salió despavorido gritando como nena.
       Los chanchitos se salieron con la suyo. Del lobo no se supo nada más, luego de un tiempo por el barrio se rumoreaba que había vuelto a la casa de su mamá pero nadie podía comprobarlo.                             
                            FIN                      
Por CAROLINA MAILEN FERRANDI MINNETTI

1 comentario:

  1. me encanta este cuento sobre todo por que soy la autora la verdad que casi todos nos esforsamos mucho por hacer esto y la actividad fue muy linda.

    ResponderEliminar

GRACIAS POR PASAR Y DEJAR TU HUELLA!!

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.