La malvada Cenicienta


H
abía una vez en una tierra lejana un hermoso castillo donde vivía la malvada Cenicienta junto con su madrastra y sus dos hijas.
   En esos días la malvada Cenicienta  se enfureció con la muerte repentina de su padre, y gritando la llama a la madrastra por teléfono diciéndole que se reúnan con sus hijas en el salón principal. En esta reunión autoritariamente les ordenó que se vayan del castillo, las dos hermanastras empezaron a llorar. En esos momentos llega un mensaje de texto escrito por el rey, diciendo que al otro día se tenían que presentar en el baile del palacio todas las doncellas, para que su hijo el príncipe encuentre esposa.
   Todas empezaron con los preparativos de la fiesta eligiendo los vestidos, joyas, peinados, zapatos.
   Al día siguiente están ansiosas por salir pero la malvada Cenicienta encierra a las hermanastras en el altillo del castillo, para poder ir sola a la fiesta. Llamando por teléfono a la limusina para que venga rápido a buscarla. Llegó al baile con una fría sonrisa.
   Mientras tanto en el castillo las hermanastras lloraban desesperadamente queriendo salir. Fue cuando mágicamente aparece una luz que se convierte en un hada madrina y que con dulzura en sus ojos les preguntó qué sucedía, entonces ellas le contaron lo que pasaba. Moviendo su varita les pregunta si quieren ir al baile, y ellas contestan que sí y con unos pases mágicos las viste hermosamente.
  Al llegar al baile con brillos y collares en un rincón se sentaron, la música empezó a sonar y a Cenicienta le aturdía, se fue corriendo y llamó a un taxi. Cuando llegó al castillo se encerró en su pieza y se durmió.
  Las hermanastras entraron al baile el príncipe las vio y les preguntó cómo se llamaban y de dónde venían, agarró a una y la llevó a bailar,  toda la noche. De pronto apareció el hada madrina y les dijo que si no se iban el hechizo se iba a acabar, las chicas salieron corriendo como locas y a una se le había caído el zapato, pero el príncipe lo agarró y se lo guardó hasta que fuera el día en que la viera y se lo devolviera.
  Cuando llegaron las esperadas al castillo la puerta estaba cerrada y entraron por la ventana y cuando estaban dentro el hechizo había desaparecido, entonces vino el hada madrina y les preguntó ¿se divirtieron?, bueno, les dijo despidiéndose, cuando me necesiten sólo me tienen que mandar un mensaje de texto y vuelvo.
  Entonces un día por orden del rey se buscaba la doncella que le fuera el zapato y al ver la malvada Cenicienta las encerró para que no la descubran, cuando llego el príncipe la madre al ver que estaban encerradas, les abrió, y el príncipe reconoció a la doncella que le quedaba el zapato. Y con mucha bronca quejándose la malvada Cenicienta gritó ¡¡el zapato es mío!! Pero cuando se lo quiso poner no le entraba.
  Al poco tiempo el príncipe en una gran fiesta se casó con la doncella y la malvada Cenicienta se convirtió en la sirvienta llorando por los rincones del castillo.
                                                                                                                  FIN                       

Por: Maya Martínez Sica

1 comentario:

GRACIAS POR PASAR Y DEJAR TU HUELLA!!

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